Algunos emprendedores todavía ven la contratación del bufete de abogados como un costo y no como una inversión, capaz de optimizar los negocios y evitar trastornos de su empresa en el futuro.
La mayoría sólo busca un abogado, en realidad, cuando ya se encuentra ante un problema, a veces incluso con un daño patrimonial inminente. ¡Sin embargo, en muchos casos, este problema podría haberse evitado, con una asesoría jurídica actuante, que anticipa los posibles riesgos y reduzca o elimine los gastos - y los programas de cumplimiento son ideales para ello!
Después de todo, ¿Que vale más para su empresa?
Hablando de costos, es importante ser objetivo: lo que se gasta, en promedio, por un único servicio jurídico de urgencia, es decir, aquel prestado sobre la hora con el problema ya consolidado, es el mismo (o incluso más) que sí, este fuera pagada por meses o hasta años, en la contratación de una asesoría jurídica permanente.
En el cálculo del valor a ser pagado al bufete de abogados para la
resolución de conflictos en su negocio, algunos factores suelen ser tenidos en cuenta, tales como tamaño, área de actuación y las reales necesidades de la organización, entre otros. Todo esto debe ser contabilizado.
Recuerde que todo abogado, para actuar en un proceso, cobra generalmente algún porcentaje sobre el valor del auto de infracción para hacer la defensa tributaria, o de los fondos pleiteados en una acción laboral. Es decir, la empresa necesita estar preparada para estos desembolsos.
Como se ve, entonces vale la pena contratar una asesoría jurídica, sea para reducir costos, sea principalmente para garantizar la seguridad de sus negocios. De esta forma, los gestores tendrán incluso más tiempo libre para dedicarse a los objetivos de la empresa, lo que seguramente reflejará en el aumento de la productividad y, por consiguiente, en mayores beneficios.