Lavarse las manos es una medida de higiene que ayuda muchísimo a reducir la cantidad de gérmenes y bacterias que se impregnan en nuestra piel al entrar en contacto algunas superficies.
La manera más popular de secarse las manos es utilizando una toalla ya sea de tela o papel, pero estas guardan humedad y esto favorece el desarrollo de gérmenes en sus tejidos, y si son de papel esto implica un gasto que genera un fuerte impacto en el medio ambiente. Por esa razón fueron creados los
secadores de mano innovadores, un aparato funcional que además desempeña una función decorativa, son más higiénicos y seguros, bajo ruidos, con filtros Hepa H13 que retienen contaminantes y partículas pequeñas eliminado el 99,97% de las partículas contaminantes en suspensión, incluyen además ZeroSmell, un gel para eliminar los malos olores y mejorar la calidad del aire.