Durante años, las benzodiacepinas fueron mi solución temporal a la ansiedad y el insomnio. Al principio, me parecieron una herramienta increíble. Aumentaban mi tranquilidad y me ayudaban a dormir. Sin embargo, pronto me di cuenta de que mi dependencia a estas pastillas estaba afectando todos los aspectos de mi vida. La receta que una vez había sido una solución se convirtió en una cadena que me mantenía cautivo.

Cuando finalmente decidí buscar ayuda, llegué a Conciencia2s. El proceso de desintoxicación fue aterrador, pero sabía que estaba en el lugar correcto. Desde el primer día, me ofrecieron un enfoque comprensivo y humano. Las sesiones de terapia me ayudaron a entender las razones detrás de mi dependencia y a encontrar nuevos métodos para lidiar con la ansiedad que no implicaran medicamentos.

Una de las cosas más poderosas que aprendí fue el valor de la comunidad. Las interacciones con otros que estaban atravesando experiencias similares me hicieron sentir menos solo. Al compartir nuestras historias, encontramos fuerza y esperanza en nuestros avances, no importa cuán pequeños fueran.

Ahora, meses después de dejar la adicción a las benzodiacepinas, me siento más fuerte y más libre. Mi ansiedad sigue existiendo, pero he aprendido a manejarla de maneras que nunca hubiera imaginado. La vida ha vuelto a ser vibrante y rica, y cada día me siento más cerca de ser quien siempre quise ser. Gracias a Conciencia2s, he encontrado la claridad y el propósito que creía perdidos.